sábado, 25 de julio de 2020

Espejito en la pared

Siempre vengo 
al caer el sol
a escuchar palabras 
que me alejen del rencor.

"¿Quién es, espejo,
quién es?" pregunto,
a veces sin querer.
"Tú eres, mi ama,
tú eres, mi amor".

Me postro ante él
Y vuelvo a preguntar, 
Pero el espejo no muestra
Quién soy en realidad.

Siempre engaña, 
ahora lo sé, 
me enseña una imagen
que no puedo ver.

"Espejito en la pared
contéstame sin esconder
los lamentos de mi alma
ni los años que fieros pasan."

"Entonces, dueña,
al decir entrego mi alma
que ni en vos hay bondad
ni en vuestro rostro beldad.

Si gustáis, rompedme en cien,
que no soy quién para contrariar
a quien me revive cada atardecer
con su canto temeroso
de recibir la cruel verdad
de este siervo sin más."
Propietario e inquilino y una conversación con un espejo mágico

domingo, 17 de mayo de 2020

Memento

Me perdería mil veces,
durante horas,
entre mis recuerdos.

Miraría
una y otra vez
las fotografías,
recordando esos momentos.

Vivo anclada en el pasado,
para mí el tiempo no pasa,
no cura nada,
las heridas siguen abiertas después de tanto.

Mi pasado
no está enterrado,
y si alguna vez he errado,
recordaré uno tras uno los recuerdos guardados.

martes, 28 de abril de 2020

Sombras

Los ojos rojos, morados,
de todos los colores,
después de conocer ciertas noticias.

En el acto el sentimiento es opaco
pero luego el cerebro se anima
y te canta una nana
y tu ansiedad te asfixia.

Enseguida tu alma te llama
te exige que sientas,
que padezcas,
que te encojas hasta desaparecer.

Te resistes... ¡resiste!
Te ordena que no sucumbas.

El mismo que te incita a volar,
El mismo que te incita a hundirte.

El mismo que te ayuda a nadar,
El mismo que te empuja a morirte.

sábado, 21 de marzo de 2020

Quiero ser la Luna

Quiero mirar hacia adelante. Quiero ser yo misma, quiero alejarme de todo el que no me aporta nada o no me hace bien. Quiero andar cada vez más rápido hacia mis decisiones, hacia mis deseos.

Voy nadando con fuerza hacia la superficie, dejar de ahogarme con prejuicios, y salir al océano. Me quiero ir de esta charca de siempre, donde hay siempre lxs mismxs peces dando vueltas, creyendo que van a alguna parte.

Quiero volar fuera del nido que mi mente ha creado. Quiero ser eterna e infinita. Quiero decidir, quiero reír, quiero disfrutar, quiero... ser yo misma.

Quiero ser la maldita luna: enorme, brillante, sola.

jueves, 19 de marzo de 2020

El hombre que no encontraba la Luna

"La encontraremos juntos" me decía siempre él.

Yo ya sabía dónde estaba, sólo tenía que mirar hacia arriba y, ¡voilà! Allí estaba. Pero él... parecía que no miraba.
A veces, incluso parecía no importarle no encontrarla. Yo le decía: mira, ahí, justo ahí... ¿ves?
Y él contestaba: aish, uish... no... ¡no la veo!
Y yo cada día más me hartaba de que no la encontrara. 

Le preguntaba: ¿no quieres verla?
Y él respondía: claaaaaro que quiero, ¡ya lo intento!

No lo intentaba de verdad, porque cansaba demasiado mirar hacia arriba.

Pues tranquilo, amiguito. Me la busco yo solita, no te necesito para nada. 

Al final le dejé, estaba harta de la insatisfacción. Me puse a mirar a la Luna yo sola.